Por Sierra Knoch
Mayo 2, 2018 (HER CAMPUS) — Has pasado meses esperando ansiosamente tus cartas de aceptación. Finalmente las recibes y, ¡sorpresa! ¡Fuiste aceptado en las dos universidades de tus sueños! Una vez hayas superado el shock inicial de las buenas noticias, es hora de decidir. Puede sonar divertido ir a dos universidades al mismo tiempo, pero obviamente no es posible y debes elegir una. ¡Aquí hay algunos consejos para ayudarte!
1. Comienza con una lista de pros y contras
Hacer una lista de pros y contras es un buen punto de partida pero, al tener que decidir entre dos excelentes opciones, puede requerir una investigación más profunda. Luego de hacer la lista de pros y contras para ambas universidades, intenta hacer una lista por a parte para ti, e incluye factores que estés considerando, tales como; vida social; locación; y costo. Organiza esta lista de mayor a menor importancia según tu preferencia. Esto requerir un poco de retro-inspección, pero teniendo una guía sobre tus propias preferencias te dará una mayor ayuda en la comparación entre lo bueno y lo malo de cada universidad. Enfócate en lo que valoras en este momento de tú vida, así como también las cosas que estás buscando adicionar mientras vas cumpliendo tus objetivos.
2. Visita cada campus
Después de investigar un poco sobre ambas universidades, es una buena idea visitar cada universidad, especialmente si no has estado en el campus antes. Si bien el consejo puede sonar cliché y usado en exceso, a menudo se da por una razón. ¡Realmente funciona! Hay algo acerca de la sensación que se siente al pisar el campus que todas las estadísticas y listas del mundo no pueden reemplazar. ¡Y recuerda confiar en tus instintos porque a veces pueden sorprenderte! Los grandes nombres y los premios no deberían ser los únicos factores que uses para tomar tú decisión, porque los premios no te harán feliz durante los próximos 4 años. Recuerda que no solo estás buscando una universidad de gran nombre en tu currículum. Estás buscando un lugar en el que puedas crear una red para construir el resto de tu vida.
Bari Norman, fundadora y presidente de Expert Admissions, dice: “Recomiendo volver a visitar ambos campus y pasar la noche en los dormitorios con un estudiante de primer año; intenta ir en un momento en el que puedas tener una idea de lo duro que trabajan los estudiantes y personas y también de cuánto se divierten. Ambos son extremadamente importantes. Creo que familiarizarse tanto como sea posible con las personas y el ambiente de cada universidad es esencial para evaluar la decisión. Y en cualquier etapa del proceso universitario, siempre trata de hablar con «estudiantes comunes», es decir, no con los guías turísticos de admisión; estos serán tú mejor fuente de información honesta «.
3. Consulta a amigos y familiares
Después de visitar ambas universidades, tendrás una mejor idea de cómo encaja cada una con tu personalidad y tu visión para tu futuro. Quizás en esta etapa del proceso tu decisión sea fácil y ya habrás descartado una. Pero, si todavía estás atrapado, considera pedirle consejo a tu familia, especialmente a aquellos que visitaron la universidad contigo. Recibir consejos de alguien con una perspectiva externa puede ayudarte a ver puntos que de otro modo no habrías notado.
Cuando decidía a qué universidad asistir, haber hablado con mi abuela me ayudó a considerar cosas que nunca habría pensado por mi cuenta, como la conveniencia de cosas como tiendas de comida y transporte público. Recorrimos varias universidades en Los Ángeles y revisamos la ubicación y los beneficios de cada una. Ella hizo preguntas en los recorridos sobre servicios y actividades sociales en el campus. Definitivamente me alegré de estar con ella, ya que era demasiado tímida en ese momento para hacer preguntas como esa.
Sin embargo, recuerda que esta es tu decisión y no tengas miedo de defender las cosas que más te importan, ya sea un gran programa de ciencias o una gran vida social. Si tienes un motivo válido para algo que te apasiona, cuéntale a tu familia, incluso si al principio no te entienden.
4. Piensa de nuevo en primer lugar por qué amas a cada universidad
Finalmente, si aún no has tomado una decisión usando los métodos anteriores, intenta reflexionar sobre lo que te atrajo de cada universidad en primer lugar. Si es porque has estado soñando con asistir a esta universidad porque tu enamorado de noveno grado usaba la sudadera de esa universidad, esta podría ser una información útil para tener en cuenta. Y no olvides tener en cuenta el hecho de que los planes siempre pueden cambiar. Quién sabe, puedes llegar a la universidad de tus sueños y darte cuenta de que quieres cambiar tu especialidad a un campo completamente diferente. Intenta pensar una imagen de la universidad más amplia y completa. Según Norman, es importante centrarse en el largo plazo.
Ella dice: «Creo que cuando eliges entre dos lugares que crees que amas por igual, tienes que separarte mentalmente de la escuela secundaria y pensar en lo que te hará más feliz a largo plazo».
Hazte preguntas como, ¿apoyan a sus estudiantes más allá de la graduación? Y, ¿proporcionan una educación integral con un enfoque en el estudiante en su conjunto? Estas son las cosas que te beneficiarán sin importar el programa que elijas. Y en todo este caos, ¡no te olvides de felicitarte por un trabajo bien hecho!
Elegir universidades puede ser una decisión difícil, pero recuerda que, no importa a dónde vayas, prosperarás y encontrarás la manera de aprovechar al máximo la experiencia.
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