Por Mary Hilliard
Septiembre 20, 2017 (HER CAMPUS) — La sola frase «proceso de admisión universitario» puede llevar a los estudiantes de secundaria a una espiral de estrés, ansiedad e incertidumbre. Es un concepto desalentador, los estudiantes además de haber obtenido las calificaciones y participar en actividades extracurriculares para ingresar a la universidad de sus sueños, aún tiene que pasar por el proceso de solicitud. Esto puede incluir cualquier cantidad de cosas, desde numerosos ensayos hasta incluso entrevistas. Es importante tener en cuenta algunos errores sutiles que pueden poner en peligro el proceso de admisión universitaria; estos son errores que pueden pasar por alto cuando se concentran solo en las partes principales de sus solicitudes. Estos son algunos de los errores más comunes que cometen la mayoría de los estudiantes de último año de secundaria cuando solicitan ingreso a la universidad y he aquí como evitarlos.
1. La postergación
Con la gran cantidad de tareas que deben realizar cuando se postulan a las universidades, no es de extrañar que la mayoría de los estudiantes senior intenten retrasar lo inevitable el mayor tiempo posible. Pero vivir en la negación solo les hará daño a la larga. Según Timothy Jaconette, ex empleado de la oficina de admisiones de la Universidad de Stanford y fundador de la compañía de consultoría de admisión universitaria Advanced Admit, es importante comenzar el proceso temprano.
«Si espera hasta la fecha límite para escribir algo, es posible que no esté satisfecho con su resultado final», explica Jaconette. “Creo firmemente que la clave real es comenzar temprano sus ensayos de solicitud y escribir múltiples borradores del ensayo. Si tiene un amigo o un consejero profesional de admisión que lo esté monitoreando para terminar su trabajo temprano, puede crear ensayos increíbles ”.
Si pueden, comiencen a prepararse para la universidad cuando comiencen la escuela secundaria. De esa manera, pueden ingresar a cursos desafiantes con un objetivo y comenzar a construir su currículum, agregando profundidad y amplitud. La escuela secundaria es un momento ocupado y emocionante, pero también lleno de trabajo duro. Asegúrense de que no se desperdicie postergando su solicitud y no haciendo su mejor esfuerzo.
«Aunque hay tantas cosas que suceden en la escuela secundaria, postular su solicitud realmente podría mejorar su resultado educativo», dice Jaconette. «Pasan tantos años de su vida estudiando, ¿por qué desecharlo todo con un conjunto de ensayos imperfecto?»
Al final, comenzar sus solicitudes mucho antes de la fecha límite y ser conscientes del proceso de solicitud antes del último año pueden guiarlos hacia el éxito y reducir los niveles de estrés.
2. No saber lo que quieren
Postularse a las universidades puede ser especialmente abrumador si no tienen idea de lo que quieren de su universidad y de su experiencia universitaria en general. Investiguen una variedad de universidades, incluso si no creen que sean adecuadas para ustedes, y decidan qué factores son más importantes para ustedes.
¿Qué tan grande quieren que sea su universidad? ¿Quieren Greek Life? ¿Y los deportes? ¿Privada o pública? ¿Qué región geográfica? En realidad, pensar en estas preguntas y por qué son importantes para ustedes facilitará mucho el proceso de selección. Además, recuerden la verdadera razón por la que van a la universidad: para continuar su educación. No, no tienen que saber qué quieren hacer con su vida, pero traten de explorar temas que puedan ser potencialmente interesantes para ustedes y sobre los que quieran aprender más.
«Vaya a Google Académico o vaya a la biblioteca de una universidad local y encuentre las revistas académicas de su materia favorita», sugiere Jaconette. “Lea algunos de esos artículos. Encuentre algunos conceptos que le interesen. Hable sobre ellos con sus amigos, sus maestros y cualquier persona que lo escuche «.
Esto es esencialmente lo que harán en sus cursos universitarios, y si encuentran materias que despiertan su curiosidad, busquen también universidades que valoren estas materias.
3. Postularse a las universidades equivocadas
Sin saber lo que quieren, inevitablemente perderán el tiempo postulandose a las universidades que no son adecuadas para ustedes. Al principio, una universidad puede parecer la indicada, tal vez tiene una gran reputación o equipos deportivos increíbles, pero eso no significa que sea la opción adecuada para ustedes. Según la Dra. Bari Norman, consejera educativa certificada y cofundadora y presidente de Expert Admissions, los estudiantes a veces subestiman la importancia de un buen ajuste antes de presentar la solicitud.
«Creo que los estudiantes senior a menudo elaboran sus listas sin tener en cuenta la importancia de que sea un buen ajuste, tanto en términos del impacto en las decisiones de admisión como de la felicidad general una vez que están en la universidad», dice.
Jaconette también sugiere buscar universidades que coincidan con sus intereses académicos. «Busque una escuela con el programa de pregrado que realmente necesita», explica. “Por ejemplo, aunque es una universidad famosa, UC Berkeley no tiene un programa de enfermería. Simplemente no lo llevará a donde quiere ir sí lo que quiere es ser una enfermera anestesista «.
No tienen que ir a la universidad con una clara carrera profesional en mente, pero si hay algo que estén considerando un poco, no se limiten yendo a una universidad que ni siquiera ofrece un programa para ello.
4. Tomar todos los consejos a manera personal
Hay mucha información sobre el ingreso a la universidad, pero a veces tienen que saber navegar la sobrecarga de información y seguir el consejo que mejor les convenga.
«Hay mucha información sobre admisiones a la universidad», dice la Dra. Norman. «Es bueno porque tienen una enorme cantidad de información a su alcance; y no es tan bueno porque es mucho para evaluar, no siempre es información precisa, y el asesoramiento y la estrategia son muy individualizados «.
Lean todo con un poco de escepticismo y piensen en el panorama general. ¿Es esto relevante para ustedes? «Pueden leer algo, e incluso si se trata de información buena y verificada, pero no significa que sea el consejo adecuado para ustedes», dice la Dra. Norman.
Además, probablemente ya estén recibiendo diferentes consejos de muchas personas. Si bien pueden tener buenas intenciones, asegúrense de que sus historias o consejos sean relevantes para ustedes, especialmente porque pueden no estar necesariamente basadas en conocimientos expertos. Es importante rodearse de asesores de apoyo y expertos que tengan en cuenta sus mejores intereses.
5. No aprovechar sus recursos
El consejero universitario puede ofrecerles mucha información y asistencia valiosa. La mayoría de las escuelas secundarias tienen uno o más consejeros universitarios cuyo trabajo principal es estar a su disposición: responder sus preguntas, aconsejarles y hacer que este proceso se adapte a sus necesidades específicas.
«Los estudiantes deben tener una comunicación abierta y constante con un asesor universitario de confianza», dice la Dra. Norman. “Habrá muchas voces por ahí queriendo dar consejos sobre este proceso; necesitan saber en quién deben confiar más «.
Es el futuro de ustedes, por lo que es elección y su responsabilidad de ustedes hacerse cargo del proceso de admisión. Simplemente no tengan miedo de buscar ayuda si la necesitan. No solo hay asesores en su escuela secundaria dispuestos a ayudar, sino que también hay muchos consejeros y consultores de admisión a la universidad listos para guiarlos. Los profesionales de admisiones, así como los oficiales de admisiones, quieren que ustedes obtengan éxito.
«Si leen todos los correos electrónicos que leí de los profesionales de admisiones de todo el país, aprenderían sobre la naturaleza sorprendente, desinteresada y verdaderamente cariñosa de los asesores de admisiones en Estados Unidos», dice Jaconette. «Muchos abandonaron sus carreras bien remuneradas para ayudar a los estudiantes a encontrar un ajuste perfecto».
En contra de lo que pueden creer, realmente están de su lado y están tratando de emparejarlos con la universidad que más les convenga. Trabajan detrás de escena para ayudarlos a tener éxito en sus universidades.
6. Fingir quién no eres
¿Cómo van a terminar en la escuela adecuada si fingen ser otra persona durante el proceso de admisión?
Según la Dra. Norman, los estudiantes intentarán tener un rendimiento superior en sus ensayos, pero esto solo refleja una escritura que se siente forzada y no auténtica. Su único conocimiento para dar a todos los estudiantes de último año de secundaria es: «Bajen la guardia en sus ensayos». Sus ensayos son su oportunidad de mostrar quiénes son como persona, fuera de sus calificaciones y su currículum. Asegúrense de que sea una representación genuina.
Por estresante que sea el proceso de admisión a la universidad, es de esperar que ahora tengan una idea de lo que no deben hacer y luego puedan concentrarse en lo que deben hacer. Obtengan una ventaja inicial y soliciten ayuda a su sistema de soporte si la necesitan. Y al final, si están revisando los materiales de sus solicitudes y se preguntan si será suficiente para ingresar a la universidad de sus sueños, recuerden ser sinceros. No tienen que tener calificaciones impecables y una larga lista de clubes y trabajo voluntario siempre que presenten la solicitud en las universidades que mejor se adapten a sus necesidades.
En palabras de la Dra. Norman, «La perfección rara vez es interesante o convincente».
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